¿Televisión uruguaya? ¿Inodoro defecado?


El dedo sucio en dirección al botón rojo del descontrol remoto. La TV comienza su asesinato serial:

“Dos colectivos colisionaron frontalmente en las calles x y x’. Los conductores salieron ilesos. No podemos decir lo mismo del peatón que justo atravesaba la calle, y quedo atrapado justamente entre los dos colectivos. Sus huesos fueron reducidos a polvo, tornando a su cuerpo una bolsa de calcio y licuado de órganos vitales. Como podemos ver en las cámaras, los restos del señor x’’ están dispersos por toda la calle. Lo vemos en primer plano en este preciso momento, no son restos de guiso de lentejas derramados por algún indigente; simplemente, estamos frente a restos de masa cerebral, machacada, casi perfecta para esta toma que lo único que busca es que la población tome conciencia. Los niños que vemos jugando al football en la esquina, no utilizan un balón – queridas ancianas sensacionalitas – ellos están pateando alegremente lo que queda del torso del reciente muerto: gooool! El niño de remera roja supo calzar de buena forma en el ombligo de la improvisaba pelota, y la clavo en el ángulo de una de las vidrieras! Esperen: tenemos el testimonio de uno de los familiares! Señora, ¿que piensa de esto que le sucedió a su hijo? ¿Le parece justo que la policía este rearmando su cuerpo sobre la vereda para que usted lo pueda reconocer?
- Eh, la verdad que no se mijo. Esto es increíble. Todavía no caigo. Y ahora, si me disculpa, me voy a Tata antes de que cierre. Hasta luego. Un saludo para todos los que me conocen!
Ahí teníamos las palabras de una mujer dolida, que quizá no conciba el sueño por varias noches. Y con esta toma del rompecabezas humano, volvemos a estudios.
(Ya en los estudios del canal…)
- Gracias Maicol. Muy buen trabajo.
- Y ahora pasamos al sorteo del 5 de oro. Agarren sus boletas y comiencen a controlar. Y que tengan mucha suerte! O al menos mas suerte que el señor x’’, quien es este momento nos observa desde el cielo.
(¡No se vallan! En el próximo bloque, contaremos la historia de la niña ciega, quien fue engañada por un garrapiñero, al venderle una bolsita de bolillas. Ya volvemos…)”
Más bien: inodoro chorreando televisión.
(Y el bat de baseball se estrello contra la pantalla)

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